12/3/09

I might be wrong


Son las las cinco y pico de la mañana. Escucho esta canción y me pregunto qué momento del día es éste. Hay horas huérfanas durante el día, son un límite delgado entre lo que termina de ser y lo que apenas está despertando. Todos hemos estado en ambos lados de un día, alguna vez. O bien despidiéndonos en algún portal, dando la espalda a una noche que acaba; o bien abriendo los ojos a lo que, probablemente, pueda comenzar a existir. Y así, la vida es una sucesión de cosas que mueren o nacen, infinitamente. Como se dice en física, todo depende del punto de referencia. Pero mi problema es, a esta altura, la pérdida progresiva de las referencias. ¿Me estoy durmiendo o despertando? ¿qué día es éste?
Llega un momento en el que todos parecen dormir mientras estoy despierto. Entonces yo no soy yo, sino el sueño de otros. Recíprocamente, cuando ellos - o ustedes, lectores invisibles - despiertan, yo sueño. Y así sucesivamente nos convertimos en ausencias cotidianas.

1 comentario:

P. dijo...

Buen punto, se conecta (al menos un poco) con lo que me acaba de suceder. Hay unos obreros trabajando en casa, se supone que yo me quedo a la mañana a "controlar que esté todo bien", pero me levanté recién, al grito de: "Señorita! Señoriiitaa! Nos vamos a comer, Señorita!". No llegué ni a abrirles la puerta... El sueño SIEMPRE me jugó en contra. No hay caso.